Partiendo de la estrofa
Que dividió tácita los rumbos
Me promulgo reiterando los adioses
Compilando los ratones de tu infierno
Sufro las lágrimas
Y me disuelvo en orquídeas
Que parió la semilla entre tus dientes
En tu miedo desespero
Y remiendo tu agonía con espasmos
Que pernoctan en preguntas sin respuesta
A la par de tu nada me agoniza
El fracaso que intentaba alumbrar ese vacío
De guardarnos los espacios del destino
Retomé las palabras como un réquiem
Con crueldad, furia, gozo y desencuentro
Muero y vivo en cada huella que descifro
En el muro que pusieron
Las amargas tretas crudas del destino
Tu naufragio, mi rutina, los cansancios
Se borraron pasos
Se secaron besos
Se apagó el deseo
Se anudo de más el lazo
Me caí en tu adiós
Y no estaban tus brazos
Anticipé mi lápida
Divagando tus labios
De igual manera
Instantánea, rápida
Se extinguió tu nombre
y tu lástima se excusó de mi enanez
El desgano se filtró en tu ventana
Para matar sin piedad mi niñez
Prefiero esfumarte
Mata mi cordura el recuerdo
Inexplicable de tu huída
Que agotó las esperanzas de nacer.
miércoles
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